Tuesday, June 29, 2010

Hay un Paro en las Fabricas de Sueños

Hay un paro en las fabricas de sueños.
Los obreros demandan justicia.
Se reusan a continuar viviendo
entre harapos, mentiras y trapos.

Hay un paro en las fabricas de sueños.
Los obreros imploran justicia.
Van marchando con carteles invisibles,
bolsillos vacios y esperanzas muertas.

Los obreros marchan.
Los obreros gritan.
Marchan y gritan los obreros.
Y amenazan con llenar de pesadillas
las noches oscuras, esteriles y abstractas.

Hay un paro en las fabricas de sueños.
Los obreros demandan justicia.
Van marchando con carteles invisibles,
bolsillos vacios y esperanzas muertas.

Y en una habitacion perfectamente lisa,
aislado de los ruidos de afuera,
duerme el patron con ojos extraviados,
con mente vacia y barriga obesa.

Hay un paro en las fabricas de sueños.
Los obreros imploran justicia.
Se reusan a continuar muriendo
entre harapos, mentiras y trapos.

La primera noche
fue dificil para el pueblo
despues de tantos siglos de sueño amordazado
tuvieron que soñar por su cuenta.

Para los viejos
fue algo refrescante
recordaron los tiempos pasados
cuando soñar aun no era imposible.

Los jovenes sufrieron sin embargo.
Nunca antes lo habian hecho.
Y sobre el inmenso mar de su mentes vacias
navegaron extrañas barcazas.

Aquella noche
fue algo fascinante.
Fue una noche de locura.
Fue una noche revelante.

Aquella noche
descubrio el pueblo en sus sueños
que hay existe algo mas
que existir en la vida.

Las noches de un pueblo
que a fuerza de costumbre
vive convencido
de lo justo del hambre.

Las noches de un pueblo
sonambulo y con hambre,
receptores de sueños
transmitidos por alambre.

Miguel Angel Aleman

Septiembre de 1989